Thursday, July 28, 2005

Traición a uno mismo

"¿Para qué escribir una obra si su autor no tiene ninguna pretensión metafísica, una curiosidad profunda y muy vasta qué oponer a la vida y a todas esas grandes interrogantes?".
Cierto, lo más común en esta marea de la vida que me lleva, me trae, es que traicione las breves creencias que suelo tener. Creo en lo anterior, pero lo ignoro. Continúa la escritura. Sin proponérmelo, claro. Lo más importante de esta vida se da en la contracorriente. A pausas, lento, pero sigue la escritura. No tomen muy en serio mis desvaríos. Ya habrá lugar para el eminente equilibrio. Carajo.

6 comments:

Ligustrino Campana said...

Pareces terco. Me pregunto qué dirán aquellos que te conocen. Saludos.

robles quiroz said...

Ya pues. Claudico. No volveré a este tema.
Fin de tema.
A lo que sigue.
Gracias.

Dharma said...

¿Importa mucho la razón? ¿No es suficiente la inspiración?

Anonymous said...

Lo más importante de esta vida se da en la cornisa, al borde, de cabeza, en la incoherencia, de pechito, por casualidad, por chiripada, de churro, el descalabro.

El equilibrio es sacar a relucir todos tus desequilibrios en los momentos correctos.

ps(coincido con ligustrino, se ve que usté es azotado, jaja)

robles quiroz said...

Chale.

María Antonieta Mendívil said...

Si en estos espacios también estarán vedadoslos devaríos, las obstinaciones, obsesiones, los desequilibrios, los enredos, ¿entoces qué reducto nos queda? ¿Sólo la mente? Dejaríamos de escribir y nos internarían en un manicomio. Escribir nos salva.